Dentro de los modelos de procesamiento mnésico, hay autores como Craik y Lockhart (1972) que han propuesto que la eficacia en la memoria está fuertemente influida por el nivel de profundidad del procesamiento al momento de la codificación. Estos autores consideran que existe un continuo de niveles de procesamiento en el análisis de un ítem. Los niveles más superficiales codifican las propiedades físicas y sensoriales de la información, mientras que los niveles más profundos se encargan de extraer las propiedades más abstractas de tipo semántico. Aquellos ítems que sean procesados en un nivel más profundo perdurarán más en el tiempo. Esta tarea permite verificar el efecto del tipo de procesamiento inicial de la información en la capacidad de recuerdo posterior.